Entrevista a Benito Fernández Sánchez

BOLETIN 4


En el presente 2015, se cumple el plazo para las metas Educación Para Todos (EPT) y los Objetivos de Desarrollo (ODM) acordados en el 2000, en este sentido,  diversos sectores de la sociedad civil se han propuesto generar discusiones que permitan el análisis del cumplimiento de estas metas y la consolidación de la agenda de educación hasta el 2030.

En esta mirada, organizaciones como el Consejo de Educación Popular de América Latina y el Caribe (CEAAL), la Federación Internacional de Fe y Alegría y la Asociación Latinoamericana de Educación Radiofónica (ALER), la Campaña Latinoamericana por el Derecho a la Educación (CLADE), la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO Brasil), el Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO), la Red de Educación Popular entre Mujeres de América Latina y El Caribe (REPEM), la Red de Educadores Populares del Sagrado Corazón, Consejo Internacional de Educación de Adultos (ICAE), se unen a la iniciativa ¡La educación como derecho humano se defiende!, en la que pretenden movilizarse por la educación como derecho humano fundamental para todas y todos durante toda la vida.

Es así, como en esta oportunidad, dialogamos con Benito Fernández Sánchez, docente de la Universidad mayor de San Andrés en la Paz, activista en la Campaña Boliviana por el Derecho a la Educación y quien actualmente apoya al Movimiento de Educadores Populares de Bolivia. Benito nos cuenta sobre la educación como derecho humano para todos y todas que tiene un aspecto fundamental  como es la inclusión, vista como elemento clave en el cumplimiento de las metas post 2015.



Benito señala que hay avances importantes en la inclusión en América Latina, pero señala la necesidad de una resignificación de los conceptos, dado que son además necesidades básicas del sistema educativo.



En ese sentido es necesario plantear múltiples estrategias para que la inclusión sea una realidad tangible en los sistemas educativos de América Latina y el Caribe, continente por demás que se caracteriza por su diversidad cultural.



Benito, hace un llamado a la sociedad civil y a los docentes a que hagan parte de un cambio estructural en la manera de mirar la educación y en cómo pensamos la interculturalidad, dado que esta debe apuntar a la formación de sujetos interculturales, teniendo en cuenta el enfoque diferencial y el principio fundamental de la equidad.





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